Zacarías 6: Oír obedientes a Dios

Zacarías 6:11-13 es un pasaje crucial sobre el nuevo trono en la Iglesia de Dios. En la versión New King James aparece en forma poética:

“Toma la plata y el oro, haz una corona elaborada, y ponla sobre la cabeza de Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote.

Y háblale diciendo: ‘Así ha dicho [el Eterno] de los ejércitos:

“¡He aquí el Hombre cuyo nombre es el Renuevo!

Desde su lugar Él se extiende,

y construirá el templo de [el Eternos];

Sí, Él construirá el templo de [el Eterno].

Él llevará la gloria,

y se sentará y gobernará en Su trono;

Y será sacerdote en Su trono,

Y el consejo de paz estará entre ambos”.

No existía tal cosa como una doble corona en el sacerdocio levítico. El único otro lugar en el que se menciona una corona doble es con Melquisedec, que era a la vez rey y sacerdote (Génesis 14:18-20; Hebreos 7:1-3). Melquisedec se convirtió en Jesucristo, que era “el Renuevo”.

¡Jesucristo está a punto de reinar como rey y sacerdote! En Zacarías 6:13, ¡se refiere al trono de David como Su trono! A menudo hablamos de Cristo sentado en el trono de David. Pero Dios el Padre y Cristo no están hablando así aquí. ¡Este es el trono mismode Dios el Padre que le está dando a Jesucristo!

El Comentario de Jamieson, Fausset y Brown dice: “El sentido aquí es: ‘He aquí en Josué una notable representación del Mesías’. No es en su propio interés [el de Josué] que se le coloca la corona, sino como un tipo del Mesías a punto de ser a la vez Rey y Sacerdote”. Qué espectacular es tener este trono en la Iglesia de Dios hoy, ¡justo antes del regreso del Mesías! ¡Dios el Padre y Cristo están tratando de hacernos ver la magnitud de lo que estamos llamados a formar parte! ¿Captamos lo que Dios está ilustrando en este mensaje? (Para comprender la revelación sobre el traslado del trono de David a la Iglesia de Dios, solicite o descargue en la Trompeta.es su ejemplar gratuito de El Nuevo Trono de David).

Zacarías 6 continúa: “Y los que están lejos vendrán y ayudarán a edificar el templo de [el Eterno], y conoceréis que [el Eterno] de los ejércitos me ha enviado a vosotros. Y esto sucederá si oyereis obedientes la voz de [el Eterno] vuestro Dios” (versículo 15). Aquí está ocurriendo algo dramático. Zacarías 6 y otras profecías sobre el nuevo trono de David muestran que están ocurriendo cosas deslumbrantes, y fíjese que Dios dice que eso está condicionado: “Si oyereis obedientes”.

Oyereis obedientes

Este pasaje se refiere a un tiempo antes de la Segunda Venida de Jesucristo porque dice que, si oímos obedientes, entonces se cumplirá. La Segunda Venida aún no ha sucedido. Así que las promesas que Dios hace aquí son condicionales. Ni siquiera dice simplemente si me oyereis; dice: ¡Más vale que me oigas obediente o no se cumplirá!

La palabra traducida “oyereis” también significa dar toda la atención, obediencia o escucha; significa comprender lo que uno ha oído. La idea principal de la palabra hebrea, shama, es comprender un mensaje. La traducción de Moffatt lo vierte así: “Si escuchas atentamente la voz del Eterno tu Dios”. Lo que Dios nos pide es difícil de entender y requiere que escuchemos y estudiemos atentamente.

En el momento en que es revelado el nuevo trono de David y el rey-sacerdote de doble corona de Zacarías 6, debemos escuchar atentamente todo lo que podamos sobre Dios y no sólo escuchar, sino oír obedientes a Dios. Trabaje realmente en ello. ¡Viva por cada palabra de Dios y aplique todas las que pueda! No deje que una sola palabra caiga al suelo. Todos debemos trabajar en esto más y más.

El trono de David ha continuado durante miles de años desde David, pasando por Judá, Irlanda, Escocia y luego Inglaterra. Pero después de enero de 2017, ese trono dejó de ser el trono de David y se sumió en fealdad.

Dios ha obrado algunos eventos dramáticos desde que trasladó el trono de David a esta Iglesia. Inauguramos el Instituto Armstrong de Arqueología Bíblica en Jerusalén. Organizamos otra exposición arqueológica en el Armstrong Auditorium y financiamos dos excavaciones en Jerusalén. Publicamos Estados Unidos bajo ataque y hemos enviado por correo casi 19.000 ejemplares, junto con más de 4.500 ejemplares digitales. También hemos recibido nueva revelación. ¡Dios nos ha dado tantas grandes bendiciones!

Si queremos seguir recibiendo tales bendiciones, ¡debemos oír obedientes! Si no lo hacemos, sufriremos el mismo destino que la familia real británica. Eso es lo que Dios nos está diciendo.

Un mensaje urgente

Jesucristo es “El Renuevo” de Zacarías 6:12. En la versión King James, dice que el Renuevo “crecerá de su lugar…” [“brotará de sus raíces”; versión Reina Valera]. “De” significa literalmente la parte inferior, lo que está abajo, debajo o bajo (Gesenius’ Hebrew-Chaldee Lexicon). Significa que Cristo, o Su trono, va a trasladarse de un lugar inferior a un lugar superior, un lugar espiritual. Se profetiza que eso sucederá en este tiempo final, justo antes de Su Segunda Venida.

¿Cuándo ocurre esto? Dios está haciendo hincapié en un determinado lapso de tiempo. ¡Cristo está extendiéndose de Su lugar! Va a haber algún cambio en la forma en que Él habla a este mundo. Él está hablando más directamente. ¿Qué está tratando de enseñarnos Cristo en este período de tiempo?

Jesucristo gobierna Su única y verdadera Iglesia. Él tiene una doble corona, y está empezando a utilizarla con mayor eficacia a través de la Iglesia. Estamos viviendo en el tiempo urgente justo antes del regreso de Cristo. El mundo se enfrenta a la época más devastadora de su historia. En este periodo crucial, Dios está dando a Su pueblo una oportunidad como nadie tendrá jamás.

En este tiempo crítico, ¡Dios espera un oír obediente! Su pueblo debe trabajar para recibir lo que Él quiere que tengan. La mayoría del pueblo de Dios está vacilando en este momento porque ha fallado en oír obedientemente.

Satanás tiene un gran poder y está devastando el mundo, las naciones de Israel e incluso a la mayoría de los que han estado en la verdadera Iglesia de Dios. Tiene su mente puesta en esta Obra; ¡la odia con una pasión que apenas podemos describir! Sabe lo urgentes que son los tiempos: su tiempo de gobernar la Tierra casi ha terminado. Dios le está permitiendo permanecer en el poder sólo un poco más de tiempo para que podamos aprender a vencerle y oír obedientes a Dios.

Para vencer a Satanás, necesitamos el poder de Dios. Son tiempos difíciles y solemnes, pero Dios nos dará poder. Podemos manejar cualquier problema, prueba o dificultad porque junto con este trono llegando a la Iglesia, hay más poder de Dios y más luz para este mundo. Dios está allí con Su Familia, ¡y nos está dando poder! Él promete que, si oímos obedientes, Él cuidará de nosotros, y floreceremos de muchas maneras.

La atención personal de Dios

Dios encargó a Jeremías que iniciara el derribamiento del trono de David, desde Judá hasta Irlanda. Le dijo: “Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar” (Jeremías 1:10). Este es el marco de tiempo: ¡la profecía sobre tres derribamientos del trono de David, su borrado y el establecimiento de un nuevo trono!

Entonces Jeremías escribió: “Entonces vino a mí un mensaje del Eterno, preguntándome: ‘¿Qué ves, Jeremías?’ Y yo respondí: ‘¡Veo la rama del árbol Vigía!’. El Eterno me respondió: ‘¡Atiende a lo que ves! Porque Yo vigilo mis promesas para cumplirlas” (versículos 11-12; traducción nuestra de Ferrar Fenton). Dios está vigilando personalmente todo de manera especial durante este periodo crítico, prestando atención más personal a ciertas cosas.

¿De qué “promesas” está hablando en el versículo 12? Deben ser las promesas asociadas con la comisión de Jeremías; la más importante, ¡la promesa de construir y plantar un nuevo trono después de que el antiguo haya sido borrado!

“¿Jeremías, Qué ves? Pregunta Dios. Jeremías responde: “Veo una vara [rama; versión nkj] de almendro” (versículo 11). Jeremías vio una rama, sujeta a un árbol, que brotaba y florecía y producía almendras.

Tenemos que analizar esto espiritualmente. La familia real británica está decayendo y muriendo. Esta rama estaba desnuda antes de ser trasladada a esta Iglesia. No había brotes ni florecimiento; no había almendras. Así que Dios tomó Su trono de David y se lo dio a esta Iglesia, ¡una bendición tremenda! ¡Donde Dios ha colocado el trono de David ahora está brotando, floreciendo y produciendo frutos como nunca antes! Y debemos asegurarnos de seguir dando frutos abundantes.

Si usted tiene una rama de almendro, ¿dónde está el árbol? El árbol es la comisión de Jeremías. Después del versículo 10, Jeremías comienza inmediatamente a hablar del nuevo trono.

Esa visión, sin embargo, fluye directamente hacia la visión de la olla hirviente (versículos 13-14). La “olla que hierve… hacia el norte” ¡es un Sacro Imperio Romano liderado por Alemania que destruirá a las dos naciones del Israel profético (Gran Bretaña y Estados Unidos) y a Judá, la nación judía! Estas naciones deben arrepentirse para evitar que eso suceda. (Todo esto se explica en Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía. Solicite o descargue una ejemplar gratuito en laTrompeta.es). La olla está a punto de derramarse, y eso significa problemas aterradores. Mire lo que ocurrió en la Segunda Guerra Mundial: dirigidos por un loco poseído, ¡los alemanes intentaron exterminar a todos los judíos y mataron a 60 millones de personas en el proceso! Y Dios dice que lo que se avecina será mucho peor.

Afortunadamente, Dios nos ha dado aún más poder para afrontar lo que se nos presente. Él quiere que aprovechemos al máximo el hecho de tener una nueva piedra del destino y un nuevo trono.

Es un gran honor tener la doble corona. Pero en poco tiempo, todo el pueblo de Dios tendrá esa doble corona y se sentará en el trono con Jesucristo, gobernando con Él para siempre. Así que tener esa doble corona hoy es muy pequeño comparado con lo que cada miembro está a punto de recibir, si usted oye obediente a Dios.

Dios quiere que nos empujemos a hacer más de lo que haríamos normalmente y que nos sacrifiquemos más. Espera más de Su pueblo que en el pasado. Hay un cambio. ¡Nos acercamos al regreso de Jesucristo y a Su reinado en el trono de David como Rey y Sacerdote! Dios se está preparando para eso y preparándonos para ello y haciendo grandes cosas en Su Iglesia. ¡Todos necesitamos hacer todo lo que podamos para oír obedientes a Dios y aplicar cada Palabra de Dios!